22 Ago Científicos israelíes afirman que virus puede vencer a las bacterias resistentes a los antibióticos
El fago PASA16.
El estudio allana el camino para futuros ensayos clínicos y anima a seguir explorando la terapia con fagos como método alternativo y auxiliar contra las infecciones resistentes a los antibióticos.
POR: JUDY SIEGEL-ITZKOVICH
La creciente resistencia de las bacterias a los antibióticos preocupa a médicos e investigadores de todo el mundo. Ahora, un estudio internacional dirigido por un equipo del Centro Médico Universitario Hadassah y la Facultad de Odontología de la Universidad Hebrea de Jerusalem demuestra la eficacia potencial de la terapia con el bacteriófago PASA16 para hacer frente a las peligrosas infecciones por Pseudomonas aeruginosa.
El estudio allana el camino para futuros ensayos clínicos y anima a seguir explorando la terapia con fagos como método alternativo y auxiliar contra las infecciones resistentes a los antibióticos, sugirieron los autores.
Ran Nir-Paz, profesor asociado de microbiología clínica y enfermedades infecciosas en Hadassah, que también trabaja en la Universidad Hebrea y en el Centro Israelí de Terapia Fágica de Hadassah, y el Dr. Ronen Hazan, del instituto de investigación biológica de la facultad de odontología de la universidad, dirigieron el equipo que publicó el estudio en la revista Clinical Advances. Se titulaba «Infecciones refractarias por Pseudomonas aeruginosa tratadas con el fago PASA16: una serie de casos de uso compasivo».
¿Cómo pueden utilizarse los virus para ayudar donde los antibióticos no pueden?
El uso de virus antibacterianos específicos contra las infecciones ha suscitado mucha atención como complemento fundamental de los antibióticos convencionales, aunque se han realizado pocos ensayos clínicos para probar los fagos en pacientes. Éste ha sido el mayor estudio de este tipo, y hasta ahora ha arrojado un impresionante porcentaje de éxito del 86,6%.
Pseudomonas aeruginosa es una bacteria que se encuentra en el medio ambiente -en el suelo, el agua y las plantas- y como parte de las bacterias en los seres humanos. Es a la vez un patógeno y una bacteria oportunista, causante de infecciones en pacientes con sistemas inmunitarios debilitados o enfermedades crónicas subyacentes.
Bacteria estreptococo A
Antes de iniciar el tratamiento, se analizaron todas las muestras de Pseudomonas aeruginosa de los pacientes y se personalizó el tratamiento en aquellos que resultaron sensibles al fago PASA16.
Durante el tratamiento con el fago PASA16, sólo se observaron efectos secundarios leves y manejables. Sorprendentemente, 13 de los 15 pacientes con datos disponibles tuvieron un resultado clínico favorable. La duración del tratamiento osciló entre ocho días y seis semanas, con regímenes de uno a dos días.
Esto pone de relieve el potencial de la combinación del fago PASA16 con antibióticos como enfoque prometedor para pacientes con tratamientos que no han tenido éxito anteriormente.
«Estamos eufóricos por los prometedores resultados de nuestro estudio con el fago PASA16 para tratar infecciones graves por Pseudomonas aeruginosa», escribieron los investigadores israelíes, a los que se unieron colegas de Israel, Estados Unidos y Australia. «Esta investigación pionera ofrece esperanza a los pacientes con infecciones persistentes y pone de relieve el potencial de la terapia con fagos como una valiosa alternativa a los antibióticos convencionales en la lucha contra los patógenos resistentes a los antibióticos».
Los bacteriófagos, también llamados fagos o virus bacterianos, pertenecen a un grupo de virus que infectan bacterias. Fueron descubiertos de forma independiente por Frederick Twort en Gran Bretaña en 1915 y Félix d’Hérelle en Francia en 1917. D’Hérelle acuñó el término bacteriófago, que significa «devorador de bacterias», para describir la capacidad del agente para destruir bacterias.
Existen miles de variedades de fagos, cada uno de los cuales puede infectar sólo un tipo o unos pocos tipos de bacterias. Como todos los virus, los fagos son organismos simples formados por un núcleo de material genético (ácido nucleico) rodeado por una cápside proteica. El ácido nucleico puede ser ADN o ARN y puede ser bicatenario o monocatenario.
Los fagos se utilizan desde finales del siglo XX como alternativa a los antibióticos en la antigua Unión Soviética y Europa Central, así como en Francia. Se consideran una posible terapia contra las cepas multirresistentes de muchas bacterias.
Los autores afirman que su trabajo pone de relieve el potencial de la combinación de los fagos PASA16 con antibióticos como enfoque prometedor para pacientes con tratamientos que no han tenido éxito anteriormente.
«Al esbozar posibles protocolos clínicos, este estudio allana el camino para futuros ensayos», escribieron. «El éxito observado anima a seguir investigando y explorando la terapia con fagos como enfoque alternativo y complementario para combatir las infecciones resistentes a los antibióticos».
Estas infecciones bacterianas pueden ser de leves a graves y afectar a diversas partes del cuerpo, como los pulmones, las vías urinarias, la piel y las heridas. Es una causa frecuente de infecciones hospitalarias, sobre todo en pacientes con sistemas inmunitarios débiles o que utilizan ventilación mecánica o dispositivos invasivos.
La capacidad del patógeno para formar biopelículas protectoras dificulta el tratamiento, por lo que a veces es necesario combinar antibióticos y terapias alternativas como la fagoterapia. Para combatir su persistencia son esenciales estrictas medidas de control de infecciones en los centros sanitarios.
El fago, proporcionado gratuitamente por la empresa estadounidense Adaptive Phage Therapeutics, se administró por diversos métodos, como vía intravenosa, aplicación local en el lugar de la infección y uso tópico.
Traducción: Comunidad Judía de Guayaquil
Fuente: The Jerusalem Post
https://www.jpost.com/health-and-wellness/article-754187
