05 Ago Las diferencias entre los femicidios en la población árabe y judía

Hadar Gil-Ad.
Kobi Kunkas

Opinión. La mayoría de las mujeres asesinadas por sus parejas en Israel son árabes. La resolución de los casos, las tasas de condena y el nivel de los castigos revela discriminación estatal.

Las hijas de Rabab Abu Siam, de 3, 5 y 8 años, se sumaron a la lista de niñas que tendrán que soportar para siempre la imagen de su madre desangrándose y que ven a sus familias desmoronarse en un instante. Fue un asesinato previsible: las luces de advertencia se habían encendido y todos sabían que su vida corría peligro.

“Si me mata, cuida a mis niñas”, le pidió a su hermana unos días antes. La policía y todos los organismos pertinentes sabían que la vida de Rabab corría peligro. Pero el sistema está roto. Le dispararon mientras jugaba con sus hijas en el patio. Una de ellas estaba sentada en su regazo.

Las siete mujeres árabes israelíes asesinadas durante 2022.
(Ynet)

Dos mujeres fueron asesinadas en Israel en menos de una semana. En total son 11 femicidios desde principios de año, de los cuales siete víctimas son árabes. Sus muertes combinan años de abandono, falta de presupuesto y ausencia de legislación necesaria para evitar el asesinato de 20 mujeres cada año en el país. Estos desastres están demasiado abajo en las prioridades políticas.

El discurso cambió, la conciencia social aumentó y las mujeres israelíes tienen más herramientas para identificar el peligro y saber a quién acudir. Pero la brecha entre el discurso social y los hechos sigue siendo grande y profunda. Se estima que, en la última década, la mitad de las mujeres asesinadas por un familiar atravesaban situaciones de peligro conocidas por los servicios de Bienestar Social. Alrededor de un tercio de esas víctimas había denunciado a su pareja ante la policía.

“Si me mata, cuida a mis niñas”, le pidió a su hermana unos días antes. La policía y todos los organismos pertinentes sabían que la vida de Rabab corría peligro. Pero el sistema está roto. Le dispararon mientras jugaba con sus hijas en el patio.

De las siete mujeres árabes asesinadas este año, solo dos casos se resolvieron. Un estudio realizado por la Asociación de Mujeres contra la Violencia señala que las mujeres árabes israelíes, un sector que equivale al 19% del total de mujeres israelíes mayores de 18 años, representa el 58% de los femicidios. Tres veces más que el porcentaje de incidencia en la población.

Una comparación del tratamiento estatal de los femicidios a mujeres árabes y judías durante una década, entre 2008 y 2018, revela una severa discriminación. El 84% de los asesinatos sin resolver son casos de víctimas árabes. Las tasas de condena en causas de mujeres judías asesinadas es del 75%, y contrastan con el 34% del sector árabe.

Diferencias entre los femicidios de israelíes árabes y judías.
(Nadav Abbas)

La disparidad también se exhibe en las sentencias judiciales: mientras que los asesinatos de mujeres judías fueron castigados con penas de 14 a 18 años, para las causas de femicidios en la sociedad árabe fue de apenas 5,5 años en promedio. “La política laxa para lidiar con el asesinatos de mujeres en general, y de palestinas ciudadanas de Israel en particular, allana el camino hacia la próxima muerte por cuestión de género”, denuncian las autoras del informe.

Israel sigue en deuda respecto al tratamiento de la violencia contra la mujer. Cada primer ministro, parlamentario o ministro cuyo rol fue servir al Estado de Israel en los últimos gobiernos, y que no utilizó ese poder para promover leyes y presupuestos para combatir la violencia doméstica, es responsable de esta realidad. Ellos deben mirar a los ojos a las hijas de Rabab, así como a decenas de niños huérfanos, y reconocer que no hicieron lo suficiente para salvar a sus madres.

Fuente: Ynet Español
https://www.ynetespanol.com/global/opinion/article/sjboxhup9