26 Dic Editorial – Opinión: Recordando la persecución de los cristianos de Bangladesh en Navidad
Mientras los cristianos de todo el mundo celebran las festividades de Navidad, los cristianos de Bangladesh se enfrentan a un sombrío futuro bajo el gobierno de Sheikh Hasina.
Cristianos de Bangladesh ofrecen flores en un servicio de Navidad en una iglesia en Tejgaon, Dhaka en 2005. Foto: EPA
Mientras los cristianos de todo el mundo celebran las festividades de Navidad, los cristianos de Bangladesh no pueden celebrar las fiestas con el mismo nivel de alegría que la gente de las Américas y Europa. Esto se debe a que son sistemáticamente oprimidos, desposeídos, les roban sus tierras, son asesinados, violados y enfrentan cualquier otro tipo de atrocidad imaginable en su país de origen simplemente por creer en los milagros de Jesucristo, hijo de María.
Tomemos la difícil situación del pueblo cristiano Khasi, un grupo étnico tribal en Bangladesh a quien sistemáticamente se le roban sus tierras. Debido a los reiterados conflictos con el gobierno de Bangladesh, 25 aldeas Khasi han sido borradas del mapa. Otros pueblos Khasi están en peligro de desaparecer debido al hecho de que varias plantaciones de té quieren despojarlos de sus tierras tribales ancestrales. Esto es pura codicia por parte de los propietarios de plantaciones musulmanas, que sienten que pueden abusar del pueblo Khasi simplemente porque no son musulmanes.
Como explicó el padre Anthony Sen, «tienen toda esta presión de las personas poderosas que viven a su alrededor, especialmente los musulmanes. Piensan que como son un pueblo minoritario, pueden hacer lo que quieran con ellos. Incluso piensan que pueden secuestrar a sus jóvenes mujeres o atacar a la gente. Por lo tanto, siempre tienen este tipo de presión». Los activistas cristianos de derechos humanos que intentan ayudar al pueblo Khasi reciben amenazas de muerte de grupos islamistas y el gobierno de Bangladesh no hace nada para proteger a los Khasi y sus defensores de tales violaciones de los derechos humanos básicos.
Actualmente, los cristianos representan el 0,5% de la población de Bangladesh, pero es una gran interrogante si esta minoría continuará viviendo en su tierra ancestral en los próximos años debido a la opresión sistemática que enfrentan por parte del gobierno de Bangladesh y los grupos islamistas. Por ejemplo, la policía local en Bangladesh allanó la casa de una viuda cristiana local y le robó su dinero. Cuando la comunidad cristiana local trató de defender a la viuda, hubo una confrontación violenta, que resultó en 20 personas heridas. Posteriormente, más de 100 aldeanos cristianos fueron acusados de interferir con el trabajo policial.
En otro incidente este año, Haji Ishak Miyan recibió de manos de tres mujeres cristianas tierras para ser trabajadas. Miyan decidió tomar la tierra sin pagarles a estas mujeres por desarrollarla. Para empeorar las cosas, amenazó con dispararles como a pájaron a estas tres damas cristianas con la ayuda de la Liga Awami local. Como cristianas, estas tres mujeres no tienen a dónde recurrir. Si bien la Constitución de Bangladesh otorga a los cristianos los mismos derechos que a los musulmanes, en la práctica, los cristianos de mi país son oprimidos a diario.
El surgimiento del Islam radical dentro de Bangladesh solo ha empeorado las cosas. El año pasado, ISIS mató a machetazos a Sunil Gomes cuando salía de su iglesia después de las oraciones del domingo en el pueblo de Bonpara, una de las comunidades cristianas más antiguas de Bangladesh. Alrededor de ese mismo período de tiempo, un comerciante hindú fue macheteado hasta la muerte y un médico homeópata fue asesinado junto con un médico budista. Y la difícil situación de las minorías no ha mejorado en Bangladesh desde ese entonces, como lo demuestra el reciente ataque incendiario contra 30 hogares hindúes por una supuesta publicación en Facebook.
De hecho, la atmósfera actual en Bangladesh no solo es anti-cristiana, sino también anti-hindú, anti- budista y anti-oposición. Cada vez que las minorías intentan levantarse y mejorar su situación, ésta empeora. Por ejemplo, Mithun Chowdhury, un proponente de los derechos de las minorías que encabeza el Partido Janata de Bangladesh, fue encarcelado por tratar de cambiar las cosas para mejor para las minorías de Bangladesh. Con su arresto, el gobierno de Bangladesh destruyó la voz política de los cristianos, budistas e hindúes dentro de mi país. Debido a estas atrocidades, cada vez más, los líderes cristianos en Bangladesh están saliendo de mi país porque no ven esperanza para el futuro.
Por lo tanto, como jefe del Comité de Lucha Hindú, es mi deseo en esta temporada de festividades que los cristianos de mi país puedan algún día encender sus árboles de Navidad y disfrutar de su feriado con el mismo nivel de alegría que los cristianos en las Américas y en Europa. Estoy trabajando junto con Aslam Chowdhury, Mithun Chowdhury y Farouk Chowdhury para asegurarnos de que los cristianos, hindúes y budistas vivan mejor bajo un nuevo gobierno que estamos tratando de formar. Espero que el gobierno de Sheikh Hasina no siga para que la opresión, el despojo, la violación, el robo y el asesinato de cristianos de Bangladesh y de todas las demás minorías dentro de mi país llegue a su fin, más temprano que tarde.
Fuente: The Times of Israel
Traducción: Consulado General H. de Israel en Guayaquil
