¨Era un lugar de alegría»: El tiempo se detiene en las habitaciones vacías de los rehenes retenidos en Gaza

Madre: ‘Siento que él puede sentirme cuando estoy ahí’


Agujeros de bala cubren la pared del dormitorio del rehén Ariel Bibas, de 4 años, en el kibutz Nir Oz, el 21 de junio de 2024. El nombre «Ariel» aparece en la pared en la esquina superior derecha. (AP Photo/Oded Balilty)

Las familias reflexionan sobre el significado de los santuarios internos de los cautivos, algunos de los cuales son testigos del ataque del 7 de octubre, mientras que otros destilan una tranquilidad intacta.

POR: Oded Balilty y Melanie Lidman

KIBBUTZ NIR OZ (AP) – Las habitaciones vacías de los israelíes secuestrados por Hamás el 7 de octubre permanecen congeladas en el tiempo.


La habitación del rehén Hersh Goldberg-Polin, de 23 años, en Jerusalem, 5 de julio de 2024. (AP Photo/Oded Balilty)

A los nueve meses desde su cautiverio en Gaza, las habitaciones de algunos rehenes aún muestran signos de la violencia y la lucha de aquel día: suelos manchados de sangre, paredes acribilladas, muebles chamuscados y derribados.

Otras destilan tranquilidad y rutina: sus camas permanecen sin hacer y sus pertenencias -trofeos, animales de peluche, fotos enmarcadas- permanecen intactas a instancias de las familias conmocionadas como testimonio de su ausencia.

Miles de terroristas dirigidos por Hamás mataron a unas 1.200 personas en Israel el 7 de octubre y secuestraron a 251, muchas de ellas en sus habitaciones.

Desde entonces, Israel ha matado a más de 38.000 palestinos mientras luchaba contra Hamás en Gaza, según el Ministerio de Sanidad de la Franja, dirigido por Hamás, que no distingue entre civiles y combatientes. Las Fuerzas de Defensa de Israel afirman que mataron a unos 15.000 hombres armados en Gaza, además de a unos 1.000 en Israel el 7 de octubre.

Se cree que 116 rehenes secuestrados por Hamás el 7 de octubre permanecen en Gaza -no todos vivos- después de que 105 civiles fueran liberados del cautiverio de Hamás durante una tregua de una semana a finales de noviembre, y cuatro rehenes fueran liberados antes de eso. Siete rehenes han sido rescatados con vida por las tropas, y también se han recuperado los cadáveres de 19 rehenes, entre ellos tres asesinados por error por el ejército.

Para muchos de los secuestrados del kibutz Nir Oz, sus habitaciones o casas enteras quedaron destruidas.


Se ven los restos de un colchón en el dormitorio calcinado del rehén David Cunio, de 34 años, y su esposa, la rehén liberada Sharon Alony Cunio, de 33 años, en el kibutz Nir Oz, el 21 de junio de 2024. (AP Photo/Oded Balilty)


Daños causados por una granada de mano en el dormitorio del rehén Sagui Dekel-Chen, de 35 años, en el kibutz Nir Oz, el 30 de mayo de 2024. (AP Photo/Oded Balilty)


Agujero de bala en la pared del dormitorio del rehén Doron Steinbrecher, de 30 años, en el kibutz Kfar Aza, el 24 de junio de 2024. (AP Photo/Oded Balilty)

Todo lo que queda del dormitorio carbonizado de David Cunio y Sharon Alony Cunio son los muelles enroscados de su colchón, tendidos sobre un montón de hollín.

«Este era un lugar de alegría hasta el 7 de octubre, de alegría, del don de la unión, de la entrega, del amor. Ahora, no es sólo una zona de guerra, sino un lugar de masacre», dijo Jonathan Dekel-Chen, mientras se apoyaba en el marco de la puerta del dormitorio destruido de su hijo, Sagui.

Dekel-Chen se pregunta cómo su familia, que ahora vive con otros miembros del kibutz Nir Oz en alojamientos provisionales a una hora de distancia, recuperará algún día la sensación de seguridad.

La esposa de Sagui, Avital, estaba embarazada de siete meses el 7 de octubre y sobrevivió al ataque con sus dos hijas escondiéndose durante horas en la habitación segura de la familia.

Dio a luz a una tercera hija durante el cautiverio de Sagui.

En Givatayim, un suburbio de Tel Aviv, las láminas de plástico cubren los muebles de la casa vacía de Or y Eynav Levy.

Or fue secuestrado y Eynav murió en el atentado contra el festival de música Nova, en la zona de Reim.

Su hijo de tres años, Almog, vive ahora con sus abuelos.


Un plástico cubre la cama en la casa de Eynav Levy, de 32 años, asesinada el 7 de octubre, y su marido, el rehén Or Levy, de 33 años, en Givatayim, el 9 de julio de 2024. (AP Photo/Oded Balilty)


El dormitorio del rehén Omer Neutra, de 22 años, en la casa de su pariente en Ra’anana, el 25 de junio de 2024. (AP Photo/Oded Balilty)

La familia de Naama Levy, de 20 años, soldado secuestrada en una base militar cerca de Gaza, ha conservado casi todo intacto en su dormitorio.

Pero también han llenado su habitación de collages de fotos y regalos que la gente le ha hecho a Naama para cuando regrese.

Amit Levy, hermano de Naama de 21 años, dice que a veces duerme en la habitación de su hermana cuando se siente especialmente mal. «Me ayuda a sentirla, estar en su habitación y con sus fotos a mi alrededor, no estoy triste porque siempre estoy pensando que volverá pronto a casa».


La habitación de la rehén Naama Levy, de 20 años, en Ra’anana, el 2 de julio de 2024. (AP Photo/Oded Balilty)

En la habitación de Omer Shem-Tov, de 21 años, secuestrado junto a otras 40 personas en el festival de música Nova, la luz nunca se apaga.

Su madre, Shelly Shem-Tov, puso un trozo de cinta adhesiva sobre el interruptor de la luz el 8 de octubre con instrucciones de que nadie tocara ni limpiara la habitación hasta que él volviera a casa y lo hiciera por sí mismo.

La habitación de Omer está llena de recuerdos, entre ellos un rollo de la Torá bendecido por rabinos.

«Esa habitación me da fuerzas», afirma Shem-Tov, que presiona activamente al gobierno israelí para que traiga a su hijo -y a todos los rehenes- de vuelta a casa.


La habitación del rehén Omer Shem-Tov, de 21 años, en Herzliya, el 19 de junio de 2024. (AP Photo/Oded Balilty)

«Esta habitación tiene energía», dice Shem-Tov, que reza en ella cada mañana y cada noche y mantiene largas conversaciones con sus otros hijos tumbados en la cama de Omer. «Siento que él puede sentirme cuando estoy allí».


Agujeros de bala y daños por humo en el dormitorio del rehén Ziv Berman, de 26 años, en el kibutz Kfar Aza, 24 de junio de 2024. (AP Photo/Oded Balilty)


La habitación del rehén Aryeh Zalmanovich, de 85 años, en el kibutz Nir Oz, el 21 de junio de 2024. (AP Photo/Oded Balilty)


La sangre mancha el suelo del dormitorio donde Ariel Cunio, de 27 años, y su novia, Arbel Yehud, de 29, fueron secuestrados el 7 de octubre, en el kibutz Nir Oz, el 21 de junio de 2024. (AP Photo/Oded Balilty)


El dormitorio calcinado del rehén Oded Lifshitz, de 84 años, y su esposa, la rehén liberada Yocheved Lifshitz, de 85, en el kibutz Nir Oz, el 21 de junio de 2024. (AP Photo/Oded Balilty)


La habitación del rehén Nimrod Cohen, de 19 años, en Rehovot, 23 de junio de 2024. (AP Photo/Oded Balilty)

El personal de Times of Israel ha contribuido a este reportaje.

 

Traducción: Consulado General H. de Israel en Guayaquil
Fuente: The Times of Israel



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